La monja enojada decidió ser amable en Pascua

La monja enojada decidió ser amable en Pascua

¡Qué maravilloso día de Pascua! Hoy estoy tan feliz que incluso seré amable con las monjas”, dijo.

Salió de su habitación y vio a una monja en el pasillo.

– ¡Buenos días, hermana Joanna! ¡Te ves realmente hermosa hoy! ¡Y esa camisa que estás tejiendo es tan bonita!

– Gracias madre

Tú también te ves genial, pero te levantaste del lado equivocado de la cama, ¿no?

A la madre superiora no le gustó ese comentario, pero siguió adelante de todos modos.

Vio a otra monja.

– ¡Buenos días, hermana María! ¡Te ves muy bien! Y ese bordado te queda espectacular, ¡enhorabuena!

– Gracias madre

Tu también luces hermosa

Pero parece que te levantaste del lado equivocado de la cama…

La Madre estaba furiosa, pero aun así siguió haciendo eso.

Cada vez que encontraba a una monja y la saludaba, las monjas siempre le decían lo mismo.

Entonces, cuando llegó hasta la última monja, se irritó muchísimo y decidió dejarlo todo más claro.

– ¡Buenos días, hermana Lola! Por favor, sea honesto conmigo: ¿parece que me levanté del lado equivocado de la cama?

– Sí Madre…

– ¿Puedes decirme porque?

– ¡Porque te pusiste las pantuflas del padre Anthony!