Caperucita Roja fue a visitar

Caperucita Roja fue a visitar

Caperucita Roja fue a visitar a su abuelita sin saber que el lobo ya había dado buena

cuenta de ella…

Abuelita, qué ojos tan grandes tienes.

Es para verte mejor.


Nuevamente, Caperucita mira a su abuelita y dice:

Abuelita, qué orejas tan grandes tienes.

Es para escucharte mejor.


Caperucita vuelve a insistir:

Abuelita, qué nariz tan grande tienes.

Es para olerte mejor.


Caperucita vuelve a la carga:

Abuelita, qué boca tan grande tienes.

¿A qué viniste?, ¿a visitarme o a criticarme?